Febrero es un mes normalmente conocido por ser el mes de los enamorados, y digo normalmente porque este año, además ha sido sin duda, el mes de los Congresos internos. Ciudadanos, Podemos y el Partido Popular han reafirmado sus liderazgos y marcado las directrices de trabajo para los próximos años.

El primer partido con el que compartió protagonismo Cupido fue con Ciudadanos. El partido de Albert Rivera abrió la veda con un Congreso del que salió fortalecido su líder con una nueva ejecutiva nacional que a partir de ahora trabaja en la línea del “liberalismo progresista”, término con el que parece ser esperan ganar terreno hacia la derecha. En general el partido continúa su rumbo y se prevé una actividad parlamentaria en la línea de lo marcado hasta el momento.La siguiente flecha de Cupido llegó para el Partido Popular que empezó su Congreso el viernes pasado. Tres días de ponencias, discursos, debates en un ambiente formal que no han deparado sorpresas, hasta el punto de que el asunto de la gestación subrogada, que no es materia de un debate social importante, ha resultado ser el asunto más aireado. Relevante el ascenso de Fernando Martínez-Maillo. El diputado por Zamora que ha sido nombrado Coordinador General aumentando su peso en la organización del partido, será quien dirija el día a día del partido en Génova. Por todo esto creemos que la actividad parlamentaria no sufrirá grandes vaivenes debido a que los contenidos tratados en las ponencias no suponen grandes cambios sobre la línea mantenida.Donde no parece haber llegado la flecha del amor es al partido de Pablo Iglesias que celebró su Congreso ‘no amoroso’ en Vistalegre el fin de semana. La plaza vibraba y la emoción se sentía incluso vía Streaming. Este Congreso por el contrario al anterior, sí ha dado muchísimo juego mediático. La victoria aplastante de Pablo Iglesias sobre Íñigo Errejón abre una incógnita sobre la estabilidad interna en la organización y su acción parlamentaria, ya que el equipo ganador es más partidario de la actividad en la calle.Fuera del calendario de San Valentín queda el último de los Congresos, el del PSOE que está previsto para el mes de junio. Aunque Susana Díaz no ha dicho expresamente que se presentará, su intervención en el foro de alcaldes organizado por Abel Caballero ha encarado con bastante claridad el asunto. La incertidumbre en el PSOE es en este momento es muy alta. No es nada descabellado pensar que Pedro Sánchez pudiera ganar y para entonces, no sabremos ni quién es Cupido.