Una idea que nació en un despacho del Congreso y con la inversión de una capitalización por desempleo se ha convertido en una de las compañías de referencia por sus técnicas de smart influence
Estrategos explora servicios complementarios de Marketing Digital

Madrid, 17 de mayo. Esta es la historia de una compañía, Estrategos, cuyo diseño se concibe en un despacho del Congreso de los Diputados en la primavera de 2016 y que hoy, 17 de mayo, cumple siete años con unas cifras que sus creadores no podían ni imaginar hace muy poco tiempo: incrementos del volumen de negocio de dos dígitos en cada ejercicio, un porcentaje de fidelización superior al 90%, presencia en toda España y cincuenta empleados y colaboradores, más del doble que hace doce meses.

Fran Jerez, CEO de Estrategos; Amparo Plaza, directora de Comunicación y Marketing; y Sergio López Sardinero, director de Operaciones y de Inteligencia Preventiva, fueron quienes dieron forma inicial a la idea de Estrategos. “Estábamos en nuestro mejor momento tras siete años de experiencia en el Parlamento y nos queríamos comer el mundo, pero el proyecto para el que dábamos lo mejor de nosotros mismos iba a desaparecer a las pocas semanas. La frustración que sentíamos era inmensa. Y curiosamente, de esa frustración y de mucho debate e intercambio de ideas, decidimos que una opción de futuro era el de poner nuestro conocimiento al servicio de las empresas”, manifiesta Jerez.

De allí, del Congreso, los fundadores se ‘mudaron’ al salón de la casa del hoy CEO de la consultora, invirtieron el dinero obtenido a través de la capitalización por desempleo y comenzaron a llamar a puertas para convencer a potenciales clientes de lo útil que resulta contar con el apoyo y la asesoría de un gabinete de Asuntos Públicos y Comunicación Política. Todo ello en un momento en el que esta disciplina era prácticamente una desconocida en España. Meses de gran trabajo, dedicación y desvelo “porque la vida del emprendedor es una auténtica montaña rusa”, hasta que, por fin, aparecieron los primeros clientes.

Y de tres, Fran, Amparo y Sergio, pasaron a cinco empleados, y de cinco a siete en la primavera de 2017, cuando Estrategos cumplía un año. De un salón se movió la sede a un centro de coworking y la consultora comenzó a contar con sus primeros éxitos en base a sus técnicas de inteligencia preventiva, anticipación, estrategias indirectas, técnicas grassroots y campañas electorales.

En los años posteriores -años de una moción de censura, varios procesos electorales y una pandemia- Estrategos mantuvo la velocidad de crucero e incrementó porcentajes en dos dígitos cada doce meses. Diez empleados, quince, veinte, después teletrabajo en 2020… y después la gran eclosión del negocio.

El 2022, año del boom

Parecía que la pandemia iba a convertirse en un obstáculo insalvable y resultó que la realidad deparaba a Estrategos todo lo contrario. En época de gran uso del BOE, la necesidad de las empresas y organizaciones de influir en las decisiones políticas, lograr cambios regulatorios y mejorar posicionamiento, aumentó de manera notable. Y con ello, creció el número de clientes de Estrategos. “También influyó el ‘boca a boca’ en que saliéramos reforzados de la Covid 19. La primera vez que ganamos a un nuevo cliente a través de la recomendación de un tercero, sentí una enorme satisfacción”, manifiesta Jerez.

Así llega Estrategos al año 2022, el del boom. Y el del retorno al método semipresencial de trabajo, que obliga a la directiva, con una plantilla que sobrepasa los 30 trabajadores y colaboradores, a fijar su nueva oficina en el Paseo de la Castellana, frente a las dependencias del Ministerio de Economía. Y de nuevo se obtienen nuevos clientes al mismo tiempo y llega, en palabras del CEO, “un momento muy complejo y de vértigo porque no estábamos preparados para un crecimiento tan repentino, ni en cuanto a estructura ni en cuanto a profesionalización. O nos repensábamos, o podíamos morir de éxito”.

De ahí que Estrategos, tras el verano, pare máquinas y concentre todos sus esfuerzos en mantener la calidad de sus servicios de smart influence mientras duplica su plantilla, refuerza sus delegaciones en Cataluña, Comunidad Valenciana y Asturias, pone en marcha el área de Talento y Cultura -para la gestión de los RRHH-, y añade nuevos profesionales en Regulatorio, Marketing y Comunicación.

Un proceso de crecimiento y profesionalización culminado ahora, justo cuando la compañía cumple siete años. Los socios fundadores celebran un pasado no exento de obstáculos y un futuro que, como la vida, se dibuja como una aventura intensa. Los objetivos actuales siguen pasando por seguir mejorando variables en dos dígitos, explorar servicios complementarios de Marketing Digital y reforzar presencia en Bruselas por las necesidades de los clientes. Y celebrar el octavo aniversario con la tranquilidad que otorga haber culminado de manera positiva el difícil tránsito a recorrer entre una micro pyme y una empresa de tamaño mediano.